A Jerry Zamora, por hacerlo todo “por amor al arte” y encarnar el espíritu del verdadero artista, aquel que se entrega a su obra sin esperar nada a cambio.
Por su habilidad para transformar espacios y crear mundos imaginarios y su trayectoria como creativo, que abarca desde la pintura y la escultura hasta la escenografía para grandes musicales como Malinche.
El premio fue entregado por el actor Fran Antón.